Memorias del XVI Congreso Gnóstico Internacional

“El Árbol de  la Vida”

Julio del 2013

BINAH

Binah tiene como símbolos de la Virgen: el Yoni y el cáliz que representan los órganos creadores de la mujer, así como también a la mente receptiva y la túnica de ocultación que sugiere a la materia, a las formas.

Para todos los pueblos antiguos la reproducción era una función sagrada y se referían a ella con gran respeto y reverencia, nosotros para comprender estas hieráticas enseñanzas debemos hacerlo con pureza, libres de prejuicios, conceptos y pre-conceptos, estudiar sus enseñanzas desde la base misma de sus fuerzas y potencias vitales, indispensables para toda creación.

Todo universo se fundamenta en tres fuerzas: Padre, Hijo y Espíritu Santo: Santo afirmar, Santo negar y Santo Conciliar, correspondiendo la tercera fuerza a Binah o Espíritu Santo, el mismo Shiva en el hinduismo,  que se manifiesta como potencia sexual en todo lo que es, ha sido y será.

La situación de Binah dentro del Árbol de la vida se encuentra a la cabeza del pilar de la Severidad, lo cual nos indica el rigor de la Ley, la justicia Divina, conocida en nuestro mundo como Karma.

Binah es al mismo tiempo el dios de la mística quietud y de la abundancia, así como de la destrucción y de la fecundidad. El Espíritu Santo es esa fuerza sexual que vemos entre los pistilos de las flores, eso que se expresa en los órganos creadores de todas las especies que viven; fuerza maravillosa sin la cual el Universo no podría existir.

El Espíritu Santo se desdobla en una mujer inefable, ella es la Divina Madre quien viste túnica blanca y manto azul. Binah, es Shiva, el Divino esposo de la Shakti, la Divina Madre Kundalini, la bendita diosa madre del mundo, lleva en su mano una lámpara preciosa, la divina mujer es una virgen indescriptible y se encuentra simbolizada entre los aztecas como una virgen misteriosa que tiene en su garganta una boca, porque en la laringe de los dioses se manifiesta el verbo. “En el principio era el verbo y el verbo estaba con Dios y el verbo era Dios” debemos  entender que el Espíritu Santo es el esposo de la Madre divina y que se desdobla en su esposa.  Binah puede polarizarse en forma masculina o femenina.

En la región de Binah encontramos al Tercer Logos, al Shiva particular de cualquiera de nosotros, a nuestro auténtico Ser Real. Por eso se dice que Shiva es el primogénito de la Creación, él se desdobla a sí mismo en la Divina Madre Kundalini; esto hace pensar a algunos cabalistas que Binah es femenino. Pero en realidad él es masculino y femenino y viene a estar representado con el aspecto neutro dentro de las fuerzas primarias de la creación y del cosmos. En su forma masculina es Shiva y en su forma femenina es la Shakti potencial del universo y cada quien tiene su Shiva particular y su Shakti o Divina Madre especial, individual.

Binah es el hacedor de luz “dijo Dios, hágase la luz y la luz fue hecha”. El sentido esotérico es: “porque lo dijo fue”. (Es decir que la energía de Binah tiene la facultad de crear a través del tres) porque el hombre representa a la fuerza positiva, la mujer a la fuerza negativa y la fuerza neutra del Espíritu Santo concilia a ambas.

La Tierra tiene nueve estratos y en el noveno se encuentra el laboratorio del Tercer Logos, en esta novena capa está el centro de toda masa planetaria y la energía creadora del Tercer Logos elabora los elementos químicos de la tierra, con toda su multifacética complejidad de formas; así como nuestro planeta tiene nueve esferas concéntricas y en el fondo de todas está la Energía de la potencia femenina, alegorizada con una serpiente, así las tiene también el hombre y la mujer, porque somos el Microcosmos del Macrocosmos. El hombre es un universo en miniatura, lo infinitamente pequeño es análogo a lo infinitamente grande.

El hidrógeno, el carbono, nitrógeno y oxígeno son los cuatro elementos básicos con los cuales trabaja el Tercer Logos, los elementos químicos están dispuestos en orden de sus pesos atómicos, el más ligero es el Hidrógeno cuyo peso atómico es 1 y termina con el Uranio cuyo peso atómico es 238.5 y resulta de hecho el más pesado de los elementos conocidos. Todo elemento, todo alimento, todo organismo se sintetiza en determinado tipo de hidrógeno. Los electrones vienen a constituir un puente entre el Espíritu y la materia.

En el México antiguo, la Virgen Azteca tiene cuatro manos, su significado es que ella recibe la vida del Padre y da la vida con el verbo a todas las cosas, ella es la madre del cosmos. La falda de la Virgen Azteca está formada por serpientes: en el pecho tiene una calavera que significa muerte, hay que morir para vivir, hay que perderlo todo para ganarlo todo.

En el Templo de las serpientes, llamado de Quetzalcóatl, se rendía culto al Espíritu Santo. Antes de salir el sol, un sacerdote con túnica y manto de colores blanco, negro y rojo, echaba entre ascuas de fuego, caracoles marinos blancos negros y rojos, el blanco es el Espíritu puro, el negro simboliza la caída del espíritu a la materia y el rojo el fuego del Espíritu Santo, con el cual regresamos a la blancura, éste incienso subía hasta el cielo, el sacerdote oraba por la vida y florecían las plantas, porque él es el fuego sexual del Universo. El ritual se practicaba antes de salir el sol, porque Binah es el hacedor de luz. El sacerdote pronunciaba los mantras sagrados IN EN.

El fuego del Espíritu Santo es la serpiente ígnea de nuestros mágicos poderes, es Kundalini, de los indostaníes, fuente de toda vida. En la iconografía hindú, el Señor Shiva en ocasiones aparece acompañado por Shakti o con una serpiente enroscada en el cuello junto a su laringe creadora, indicando el poder del Verbo como se señaló en la Diosa Azteca.

Cuando aparece solo, presenta atributos tanto masculinos como femeninos, ya que SHIVA-SHAKTI es la representación del andrógino divino donde existe el equilibrio entre las tres fuerzas: Positiva, negativa y neutra. La energía sexual del Tercer Logos fluye desde el centro de toda nebulosa y desde el vórtice de todo átomo. Cuando esa energía deje de fluir desde el centro de la tierra, ésta se convertirá en cadáver, esta energía divina se expresa en los órganos sexuales y por medio de la laringe creadora: estos son los dos instrumentos a través de los cuales fluye esta poderosa potencia.

Esta energía de tipo trascendental y divino tiene tres modos de expresión:

1º.          Reproducción de la especie.

2º.          Evolución de la raza humana.

3º.          Desarrollo espiritual.

La Kundalini (fuego electrónico solar o fuego sagrado) es el mismo tipo de energía con la cual el Tercer Logos elabora todos los elementos de la tierra, lamentablemente éste

fuego sagrado duerme profundamente en los seres humanos que pueblan este planeta llamado Tierra.

En la naturaleza existen tres tipos de energía:

1.            La del Padre.

2.            La del Hijo.

3.            La del Espíritu Santo.

Estas tres fuerzas primarias de la naturaleza y del cosmos, descienden para luego retornar hacia adentro y hacia arriba, esto es por Ley. Las energías del Espíritu Santo descienden hasta los órganos creadores. Las del hijo hasta el corazón y las del Padre hasta la mente. En el corazón encontramos al hijo y en la mente al Padre.  Retornando esas fuerzas hacia arriba, pasamos más allá de la cuarta, quinta y sexta dimensiones del espacio y entonces nos liberamos totalmente. Estas fuerzas son sustancias, energías trascendentales y terriblemente divinas, lo que sucede es que nosotros tendemos a antropomorfizar a las potencias de tipo superior.

¡La Tierra es tan sólo una condensación del Verbo! Todo viene del Éter, todo vuelve al Éter (quinto elemento), y más allá del Éter está el AKASH, la esencia espiritual azul, profunda y divina que llena y penetra todo el Espacio Infinito. Y el Éter es sólo la condensación a su vez, del AKASH puro.

El Akash realmente es sonido primordial, el sonido condensa por mediación de ésta vibración,  el Akash modificándose obra como éter y el éter se transforma en los cuatro elementos primordiales de la naturaleza: fuego, aire, agua y tierra. El éter químico permite que los elementos químicos de los vegetales se asocien y disocien y de esa manera la planta se llena de ricos frutos y hermosas flores, así brota la vida. El Éter luminoso tiñe de colores inefables las flores, frutos y todas las cosas. Este tipo de Éter se convierte entonces en un espejo inefable en donde la naturaleza se recrea. Así surge la vida entre las entrañas del Edén donde las montañas son azules como el cielo y transparentes como el cristal.

Indudablemente la serpiente de los grandes misterios es el aspecto femenino del LOGOS, Dios-Madre, MAHA-SARASWATI, la esposa de Shiva, la misma Isis, Adonia, Tonantzin, Rea, María, Ram-IO, Cibeles, Flora, Paula, Minerva, etc.

La iglesia del Espíritu Santo es el corazón.  El matrimonio es un misterio del corazón. El comercio del matrimonio es profanar los misterios del Espíritu Santo. El amor no se puede comprar ni vender porque entonces se comete un grave pecado (error) contra el Espíritu Santo.

Debemos saber que en Europa y E.U. Existe la “Orden del Cisne”, tal orden analiza científicamente los diversos procesos de eso que se llama AMOR. En la India el amor está simbolizado por el cisne Kala Hamsa, si somos observadores podemos ver que cuando los cisnes andan en pareja y uno muere, el otro muere también de tristeza, porque el amor se alimenta de amor. El cisne es el vehículo de Brahma y su Shakti (esposa) Saraswati, el Hamsa blanco y puro, puede como Brahma levantarse hasta el cielo y bajar a la tierra y nadar en el agua sin ensuciarse. Es símbolo del amor y vuela sobre las aguas de la vida.

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