El Astral y las Partes del Ser

El Ser es múltiple en sus manifestaciones cósmicas, es la unidad formada por la diversidad, las partes del Ser devienen desde la más pura región divinal y trascendental, podemos entender que son átomos divinos auto-conscientes e independientes que cumplen una función específica dentro de cada uno de nosotros, es difícil definir al Ser con nuestra escasa comprensión, para conocerlo necesitamos la auto-gnosis; solamente por medio del auto-conocimiento obtenemos la fuerza y el valor para el trabajo interior.

Debemos entender que esas partes del Ser se encuentran dentro de nosotros mismos, dispuestas a auxiliarnos en nuestras necesidades a cambio de una conducta recta.

MADRE DIVINA

Podemos pedir auxilio a nuestra propia Madre Divina Particular, suplicarle en nombre del Cristo que nos saque en cuerpo astral en el preciso instante de transición entre la vigilia y el sueño, un momento en que no estamos ni totalmente despiertos ni totalmente dormidos.

PRÁCTICA

Nos acostamos en decúbito dorsal (boca arriba) en nuestra cama, con el cuerpo y la mente bien relajados, nos adormecemos recitando con el pensamiento y con el corazón la siguiente plegaria:

“Creo en Dios,

Creo en mi Madre Divina

Y creo en la magia blanca

Madre Mía, sacadme de mi cuerpo

Pronunciamos esta oración con intensiva fe y devoción miles de veces, cuando ya se sienta en estado de lasitud propia del sueño; al empezar en la mente las primeras imágenes ensoñativas, hay que vencer la pereza y levantarse como un fantasma sutil y delicado.

Nuestra Divina Madre sabe adónde llevarnos, pero también podemos pedirle que nos traslade a tal o cual lugar que deseemos. Sin embargo, si ella nos lleva a otro lugar diferente, debemos acoger con gusto su decisión, pues ella sabe lo que nosotros necesitamos.

LA DONCELLA DE LOS RECUERDOS

La Doncella de los Recuerdos está íntimamente relacionada con el cuerpo vital, es la parte del Ser que corresponde a la memoria y los recuerdos del mundo astral. Es necesario que el discípulo aprenda a llevarse en sus salidas astrales a esta Doncella para poder traer la memoria de todo lo que vea y oiga en los mundos internos, pues ella sirve de mediadora entre los sentidos del cerebro del mundo físico y los sentidos ultrasensibles del cuerpo astral; viene a ser el depósito de la memoria.

En el lecho a la hora de dormir, invóquese al Ser:

“Padre mío, tu que eres mi verdadero ser, te suplico con todo el corazón y con toda el alma que saques de mi cuerpo etérico a la Doncella de mis recuerdos a fin de no olvidar nada cuando retorne a mi cuerpo”

Pronuncie luego el mantram: LAAAA RAAAA SSSSS y adormézcase. Se da a la letra SSSSS un sonido sibilante y agudo parecido al que producen los frenos de aire.

El cuerpo etérico consta de cuatro éteres: éter químico, éter de vida, éter lumínico y éter reflector. Los éteres químico y de vida, sirven de medio de manifestación a las fuerzas que trabajan en los procesos bioquímicos y fisiológicos de todo lo relacionado con la reproducción de la raza.

La luz, el calor, el color y el sonido se identifican con el éter lumínico y reflector. En estos éteres tiene su expresión el Alma sapiente, que es la Doncella querida de nuestros recuerdos. Vista clarividentemente esta doncella parece una bella dama en el cuerpo etérico.

Cuando el discípulo se halle entre la vigilia y el sueño, levántese de su cama y salga de su cuarto rumbo a la Iglesia Gnóstica (Centros de enseñanza superior). Esta orden debe tomarse tal cual, con seguridad y con fe, pues es real y no ficticia; en ello no hay mentalismos ni sugestiones. Bájese de la cama cuidadosamente para no despertarse y salga del cuarto caminando con toda naturalidad como lo hace diariamente para dirigirse al trabajo. Antes de salir dé un saltito con la intención de flotar, y si flotare diríjase a los Templos de los mundos superiores. Más, si al dar el saltito no flotare, vuelva a su lecho y repita el experimento.

No se preocupe usted por el cuerpo físico durante estas prácticas. Deje a la Naturaleza que obre y no dude porque se pierde el efecto.

ÁNGELES GUARDIANES:

Cada quien tiene a su Ángel guardián y lo puede invocar para que lo conduzca en el mundo astral, a aquellos que temen las salidas en astral, este Ángel tiene el poder de ayudar en el desdoblamiento astral en forma consciente y voluntaria.

Fuera del cuerpo físico el discípulo puede, si quiere, invocar a esta parte del Ser, llamada en esoterismo gnóstico “Ángel de la Guarda” y pedirle el favor de que lo conduzca con su cuerpo astral de manera consciente, dentro de la quinta dimensión.

FELIPE

Felipe, el Apóstol de Jesús también existe dentro de nosotros aquí y ahora, el gnóstico esoterista lo invoca cuando quiere salir en cuerpo astral. Felipe asiste al invocador y le saca en cuerpo astral, también pude llevarlo con cuerpo físico y en estado de Jinas a la cuarta dimensión.

AL CIELITO, FELIPE es la clave de la invocación, repítase la frase millares de veces, si se quiere llevar el cuerpo físico o el cuerpo astral se le ruega el servicio a Felipe, se le suplica.

Para salir en Astral se requiere un poco de sueño, pero para llevar el cuerpo físico en estado de Jinas, se requiere menos sueño y muchísima fe. Con la meditación, la reflexión, la oración, la música de los grandes Maestros, con un recto pensar, sentir y actuar vamos adquiriendo este poder consciente, indispensable para ponernos en contacto con las partes de nuestro Ser.

Instructora: María Guadalupe Licea Rivera; San Luis Potosí, S.L.P.

Imagen: Virgen de la galería. Sandro Botticelli, 1467