Casas Tapadas

Dibujo de Casas Tapadas, Plazuelas

Cada zona arqueológica tiene una enseñanza trascendental, fueron verdaderos centros de capacitación para los aspirantes al desarrollo espiritual, lugares de curación, de meditación, de oración científica, donde eran entregadas enseñanzas esotéricas profundas.

A tales lugares solo iban personas que tenían muchos valores del corazón desarrollados, y aunque parezca increíble, tales lugares siguen funcionando de la misma forma que antes, pero ahora en las dimensiones superiores de la naturaleza. Solo que ahora muchos los profanamos con nuestras actitudes de burla, crítica, lujuria, orgullo, vanidad, soberbia, etc. Mas sin embargo, el aspirante sincero, lleno de devoción, si tal como antes se prepara internamente para asistir a tales lugares, indudablemente logrará lo mismo que nuestros antepasados, obtener sabiduría, conocimientos, conciencia, curación, etc.

Las “Casas tapadas”, como le llamaban los indígenas a esta zona arqueológica, no es la excepción. En silencio dice mucho, y solo los que tengan la humildad suficiente tendrán en sus manos el conocimiento que es capaz de entregar.

Siete entradas tiene para recordarnos la ley del Heptaparaparshinok lo ley del siete, que todo lo organiza o perfecciona, indicándonos el camino de la espiritualidad, de la lucha para obtener el triunfo.

La entrada principal está al poniente, con un falo o Lingam (órgano masculino), mostrándonos la gran importancia que tiene la fuerza sexual para transformarnos radicalmente, pero indicándonos que deben morir las pasiones animales dentro de nosotros.

Entrando a “Casas Tapadas”, inmediatamente nos encontramos con la Casa de los Caracoles, donde probablemente se daban a los discípulos grandes enseñanzas, pues así lo muestra la pared-banca, acomodada como para sentarse a recibir las enseñanzas de maestro a discípulo, indicándonos  las existencias que tenemos y en las cuales como un caracol a veces estamos en espiras más altas o más bajas.

4 Pirámides componen este conjunto arquitectónico, una al norte, otra al sur, una al oriente y una en el centro, para recordarnos el sagrado Tetragrammaton o Dios, lo más sagrado, siendo la pirámide central la más grande y antigua, con 4 niveles, y las otras 3 veces construidas cada una, sumando nos dan los 13 cielos de Anáhuac, los 13 Aeones o dimensiones del gnosticismo primitivo.

Un patio hundido al norte, mostrándonos que para subir, primero hay que bajar y al poniente, detrás de la pirámide principal, como oculta en el misterio, la pirámide del oriente, con un adoratorio al pie, un lugar de sacrificio, pero no de gente o de animales –como suponemos todos-, más bien para indicarnos que algo debe nacer en nosotros (oriente, donde sale el sol), debemos sacrificar el orgullo, la lujuria, la ambición, etc.

Está bardeado en forma rectangular, para indicarnos el trabajo con los 4 elementos de la naturaleza (fuego, aire, agua y tierra), pues con ellos tenemos que trabajar para liberarnos. En la parte psicológica teniendo serenidad (fuego), adaptabilidad (agua), templanza y paciencia (tierra), desapego (aire).

“Casas Tapadas” es un libro de piedra, para que el que tenga ojos para ver vea y para que el que tenga oídos para escuchar, escuche lo que en silencio los sabios que vivieron en estas tierras nos legaron con tanto amor.

Casas Tapadas. Plazuelas

Jenaro Ismael Reyes Tovar. Comisión de Cursos por Internet

Foto 1. Foto de dibujo de casas tapadas del Museo del Sitio. Nelly López. Foto 2. Entrada principal de Casas Tapadas. Armando Ortíz.

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