Templo I. Templo del Jaguar

Templo I. El Jaguar. Zona Arqueológica de Tikal

Para los mayas, el jaguar era el rey y señor, y no en vano el mítico Templo I, situado en la gran plaza central de la ciudad de Tikal, adopta el nombre de Templo del Jaguar.

Fue denominado así porque en su crestería estaba representada la cabeza de este animal. Resulta inútil buscarla, ya que los antropólogos que dirigieron las primeras investigaciones la extrajeron, para exhibirla en el Museo Arqueológico de Ginebra.

En la amazonía colombiana, venezolana, brasileña, ecuatoriana, entre las numerosas tribus indígenas que pueblan esas espesas selvas, se rinde culto especial al jaguar o tigre americano. Los huitores, mirañas, muinanes, guahibos, etc., consideran al tigre animal sagrado e intocable hasta el grado de que, interceptado uno de ellos por la presencia del felino, a pesar de encontrarse armado con arco y flechas y, en ocasiones, hasta con arma de fuego, prefieren aprisionar a sus perros y desandar el camino, pese a todos sus intereses, antes que atentar contra el jaguar. Ninguno de ellos se atreverá jamás a matar a un tigre, porque éste representa entre otras cosas, la sabiduría, además, es el símbolo de aquellos seres que, cual auténticos felinos de la Psicología Revolucionaria, en busca de la Paz Interna, se han lanzado contra sí mismos, contra sus propios defectos psicológicos, contra sus yoes, contra su ego animal.

Es por esto que los mayas levantaron en Tikal este templo en honor al tigre.

Además del Jaguar, los mayas y todos los pueblos autóctonos de América, usaron signos geométricos muy importantes, entre ellos, el Triangulo, el Cuadrado y el Circulo, los cuales encontramos invariablemente en todos sus templos, y, los de Tikal, lógicamente, no habrían de ser la excepción.

En el Templo del Jaguar y en todos los templos de Tikal, podemos observar el Cuadrado, multiplicándose de mayor a menor tamaño, desde las faldas de esta gran pirámide truncada, hasta la misma cima de ella.

En Cábala o Sabiduría Oculta, el cuadrado, simboliza las bases, firmes y sólidas como la roca, que todo aspirante a la Autorrealización, debe construir en sí mismo.

Sabido es que, quien construye su casa sobre la arena, vendrán los vientos y las aguas y la destruirán.

Esos peligrosos vientos y esas turbulentas aguas, son los yoes de la psicología.

Las bases resistentes como el acero, son los Cuatro Pilares de la Gnosis, los Cuatro Pilares del Conocimiento, los cuatro pilares de la Sabiduría: CIENCIA, ARTE, FILOSOFÍA Y MÍSTICA; uno sólo de estos pilares que nos llegue a faltar, significa, el fracaso total.

ARTE, es la maravillosa expresión de la belleza interna.

CIENCIA, es aquello que experimentamos personalmente, es el conocimiento directo.

FILOSOFÍA, es amor a la sabiduría, que nos llevará al auto – conocimiento de sí mismos; actualmente no sabemos quiénes somos, de dónde venimos, cuál es el objeto de nuestra existencia y hacia dónde vamos.

“HOMO NOSCE TE IPSUM”, “Hombre conócete a ti mismo y conocerás el Universo y a los Dioses”, reza esta frase trascendental esculpida en el umbral del Templo de Delfos ciudad de la Grecia antigua.

MÍSTICA, es la práctica maravillosa de una moral superior.

El cuatro también representa la CRUZ. la pirámide truncada, vista desde las alturas es también una CRUZ y por tanto, representa al hombre que quiere y debe trasformarse.

Recordemos que del cruce, nace esplendorosamente todo lo nuevo.

Templo I. Forma triangular. Zona Arqueológica de Tikal

El triángulo multiplicándose de afuera hacia adentro, desde los cuatro lados de la gran pirámide del Jaguar, representa las tres fuerzas primarias de la naturaleza, de las que emana todo lo creado, es decir, la fuerza (+), la fuerza (-) y la fuerza neutra que concilia a las dos primeras.

En estricto simbolismo cabalístico, 4 + 3 = 7, La Ley del Siete o Sagrada Ley del Heptaparaparshinok.

De acuerdo con esta Ley Sagrada, citada también en la cosmogonía maya, en la hebrea, en la azteca, se establecieron siete Templos en el caos, para la construcción del Sistema Solar.

La SAGRADA GNOSIS, El SAGRADO CONOCIMIENTO, como un funcionalismo natural de la Consciencia, ha estado siempre presente en el mundo, en el Universo y en el Cosmos infinito, pues lo Sagrado equivale a la Potencia Creatriz, a la Realidad por excelencia; Potencia Sagrada quiere decir realidad, perennidad, eficiencia.

Lo Sagrado no sólo está saturado de existir, sino esencialmente de Ser.

De HUN AB KU, el GRAN ALIENTO, el INCOGNOSCIBLE, el ABSOLUTO, entre los mayas, se desprenden esas Tres Fuerzas Primarias de la Naturaleza: entre los hebreos, la primera es el Padre, la segunda es el Hijo y la tercera es el Espíritu Santo, llamadas por los mayas: Kakulha Huracán, Chipí Kakulha y Raxa Kakulha; Osiris, Isis y Horus entre los egipcios; esas Tres Fuerzas son el DEMIURGO creador del Universo, la Trinidad, representada entre los mayas como “EL CORAZÓN DEL CIELO”, es la Llama de la cual salen 7 Llamas Santas.

Esa Llama es triple, pero de ella salen las 7 Llamas; es decir, de la Llama triple sale el Eterno Heptaparaparshinok, del 3 sale el 7.

Mediante las 3 fuerzas, HUN AB KU, el Gran Aliento crea y vuelve nuevamente a crear; pero para que haya orden, para que haya un Cosmos, se necesita, que la Creación, hecha por las 3 Santas Fuerzas que emanan de HUN AB KU, se realice de acuerdo con la Ley conocida con el nombre de, la Eterna Heptapararshinok, es decir, la Ley del Siete.

Así tenemos que cada uno de nosotros, carga en su interior siete Centros Magnéticos; así tenemos que hay siete cosmos; así tenemos que hay siete mundos básicos fundamentales en nuestro Sistema Solar, siete días en la semana, siete notas musicales, etc., etc.

Así pues, si no fuera por la Ley del Siete, no existiría el orden en la creación.

El tres o Sagrada Ley del Triamazikamno puede crear, pero necesita del siete para que el orden sea perfecto.

Estas dos leyes, del 3 y del 7, constituyen, el fundamento sobre el cual se sostiene todo el Universo.

90 Escalones del Templo I. Zona Arqueológica de Tikal

El Templo del Jaguar tiene nueve plataformas y 90 escalones en su escalera frontal principal, el 9 representa el trabajo con las aguas puras de vida, sabiamente combinado, con la respiración y el verbo.

Los mayas, coinciden (como casi todos los pueblos del mundo) en que el origen del mundo, está en el “Verbo” o Logos Platónico, dice el Popol Vuh, que todo estaba en suspenso, que nada se movía, ni existía, y entonces vino “La Palabra”, esto nos recuerda a San Juan cuando dice “En un principio era el verbo…”

“Así como es arriba es abajo”, reza la afirmación de Hermes Trismegisto, de la misma forma como fue creado el Universo, así mismo, y con las mismas leyes, deberá el ser humano, extender la obra del creador en sí mismo.

“Como la neblina, como la nube y como una polvareda fue la creación…cuando el cielo estaba en suspenso y la tierra se hallaba sumergida en el agua”.

El caos Primordial (el silencio, el reposo, lo increado), se encuentra en las aguas primordiales dentro del mismo ser humano y si aprendemos a trasmutar tales aguas es posible que exista una creación superior.

El Fuego sagrado del Amor, representado por el círculo y el punto, debe fecundar las aguas puras de vida y así surge el verdadero Cosmos Hombre, (la palabra Hombre incluye al varón y la mujer).

5 Escalones del templo I. Zona Arqueológica de Tikal

El 5 en Cábala o Ciencia Secreta, representa La LEY, y Los cinco escalones, que se encuentran al pie de la escalinata principal del Templo del Jaguar, nos recuerdan que el trabajo con las aguas del Génesis, es por LEY. Quien desobedece esta Ley, tiene como destino El Abismo, a quien la obedece, la Ley representada nuevamente por los 5 escalones que se encuentran en la entrada del Santuario, localizado en la parte alta del templo del Jaguar, lo recompensa con la Gloria de la Auto Realización.

El 8 promete: Pruebas, dolores, por lo tanto, los 8 escalones truncados, en dos grupos de 4, que se de encuentran, a ambos lados del pie de la escalinata principal, nos quieren decir que en el trabajo con las aguas primordiales, seremos sometidos a pruebas y dolores. Nada se nos da regalado y el trabajo sobre sí mismos requiere de sacrificios conscientes y trabajos voluntarios.