El Escarabajo

Dentro de los millones de insectos que nos ha dado la Gran Madre Natura, existe uno con gran diversidad de especies, (más de 375,000), este es el acorazado escarabajo, llamado científicamente coleóptero. Ocupan prácticamente cualquier hábitat. La mayoría son herbívoros. Y muchas especies, si se destruye su hábitat, pueden constituir verdaderas plagas para los cultivos.

En su aspecto simbólico, encontramos la imagen del escarabajo entre los egipcios, cultura en la cual representa el alma, conjunto de virtudes, atributos y leyes, así como dones que el ser humano debe cristalizar en su interior. Los egipcios también lo llaman Jepera, ella es la Deidad creadora de los dioses, es el escarabajo sagrado, es RA en nosotros, es la Deidad.

Khepera, el dios-escarabajo de la resurrección y la nueva vida. Los libros sagrados y la literatura antigua de Oriente, vol.2, pág. 144-145. Autor desconocido. 1917.

Khepera, el dios-escarabajo de la resurrección y la nueva vida. Los libros sagrados y la literatura antigua de Oriente, vol.2, pág. 144-145. Autor desconocido. 1917.

Suponían que ese escarabajo (al que llamaban también Ḫpr o Jeper) resucitaba de la pelota de estiércol que hacía; lo cierto es que le daban un carácter simbólico, pues el escarabajo, llamado pelotero, deposita sus huevos en esa pelota y allí nacen, por este motivo los antiguos egipcios ubicaban sobre el corazón de las momias una imagen de Jepri, el escarabajo.

Vemos, pues, que el escarabajo era el símbolo de Ra, el dios Sol y, como tal, podría estimular el corazón del difunto a la vida. El escarabajo era el símbolo de las transformaciones, por lo que el fallecido podría hacer cualquier cambio en todo lo que su corazón deseara.

En la historia de las religiones y mitologías le ha cabido al escarabajo (particularmente al llamado comúnmente “escarabajo pelotero”) un lugar destacado: los antiguos egipcios le consideraban un símbolo de resurrección y vida eterna, por lo tanto, el escarabajo era muy sagrado en el antiguo Egipto porque se relaciona con el dios Khepri (pronunciado más o menos como Jepri, nombre manejado renglones arriba), quien se creó a sí mismo y volvía a nacer cada mañana de la misma manera que renace el sol, en un ciclo ininterrumpido; de hecho, este Dios hacía que el sol amaneciera. Su nombre significa "El que llega a ser (por sí mismo)". Fue representado como un escarabajo empujando al disco solar por el cielo. También como hombre con cabeza de escarabajo que, a veces, portaba un cetro “uas” y un “anj” o cruz “ansada”.

Cuando el cristianismo se difundió en el Valle del Nilo, la cristiandad copta realizó interesantes asimilaciones sincréticas de la religión precedente y así fue como adoptó el “anj” (ankh, o cruz ansada), también acogió, como alegoría, a Jepri, asimilándolo metafóricamente a Jesucristo, al que llamaban “El Buen Escarabajo”.

Es por esto que en algún texto medieval se puede encontrar la expresión bonus scarabaeus en alusión a Cristo: El escarabajo sale del huevo y luego pasa periodos oculto en estado larvario y pupa, lapsos en que se va preparando y transformando para ascender al estado adulto, fuerte como un auténtico acorazado y así enfrentar con éxito a sus depredadores; mismo trabajo que hace todo aspirante a la luz, todo aquel que quiere eliminar el ego y lograr el despertar de la conciencia; como se sabe, el cristo nace y desaparece a los doce años, en ese periodo oculto, se prepara, concreta la fortaleza del alma y vuelve a aparecer a los treinta y tres años como todo un Maestro que señala el camino a sus semejantes y deja asombrado, con sus poderes y sabiduría a propios y extraños, es un escarabajo sagrado de oro puro, símbolo maravilloso del alma santificada.

Nun, dios de las aguas del caos, levanta la barca del dios sol Ra simbolizado por el escarabajo y el disco solar. Libro de los Muertos de Anhai. 1050 a.c.

Nun, dios de las aguas del caos, levanta la barca del dios sol Ra simbolizado por el escarabajo y el disco solar. Libro de los Muertos de Anhai. 1050 a.c.

Cáncer es el signo zodiacal del Escarabajo Sagrado.

Es el signo de la reproducción. La concepción fetal se verifica con sus rayos y por ello es el signo del Escarabajo Sagrado. Toda concepción se realiza bajo las influencias cósmicas de la luna en Cáncer. La luna regula el proceso de ovulación en los ovarios del sexo femenino. Ninguna concepción sería posible sin la influencia lunar. Cáncer produce la enfermedad que lleva su nombre en todos aquellos que hacemos mal uso y abuso del sexo, de modo que el cáncer es el karma de los fornicarios.

En esta parte, y con carácter informativo, es oportuno aclarar que es indispensable comprender a fondo, el tremendo poder de esos agentes vitales llamados lisosomas, sin los cuales jamás podría mantenerse vivo el núcleo de la célula orgánica. Es a todas luces evidente, claro y verdadero que los lisosomas estabilizados del zoospermo y óvulo originan criaturas sanas y fuertes.

La píldora anticonceptiva y demás elementos biológicos y químicos destruyen los lisosomas de zoospermos y óvulos, originando entonces, criaturas enfermas, locos, paralíticos, sordomudos, ciegos, idiotas, infra sexuales, etc. Los hombres de ciencia han podido verificar por sí mismos, que las pomadas aplicadas al cuello de la matriz con el propósito de bloquearla, destruyen lisosomas celulares. Esos lisosomas destruidos actúan libremente aniquilando células y originando úlceras en las paredes vaginales y cuello de la matriz. Los lisosomas en plena actividad armoniosa, dentro de la célula viva, constituyen el fundamento de la existencia.

Cáncer, el signo del cangrejo o del escarabajo sagrado, es la casa de la Luna donde el feto se desarrolla y fortalece y por último adquiere la figura humana para nacer, para salir al mundo y continuar su desarrollo en los aspectos correspondientes a su condición humana y espiritual. El escarabajo nos indica los ocultos periodos de la transformación de sí mismos.

Fuentes: Tratado esotérico de astrología, Tratado de Alquimia Sexual, Curso Zodiacal, Más allá de la Muerte.

“En el Egipto, el Escarabajo Sagrado simboliza el Alma”. Samael Aun Weor.

Enviado por: Instructor: José Isabel Mauricio Vargas. Loreto Zac.

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